viernes, 21 de noviembre de 2008

COMO NOS PREPARAMOS


La práctica rural de formación docente está rodeada de temores, expectativas, miedos, ansiedad y un sin número de sentimientos encontrados que es difícil de explicar.
Para mi fue muy triste saber que estaría lejos de las personas que quiero, el apego afectivo que se construye hacia las personas que nos rodean se convierte en algo inevitable, sabia de ante mano que extrañaría mis objetos personales (mi cama, mi almohada, mi osito de peluche), por fin vería el verdadero valor de estar al lado de mis papitos, mis hermanos y mis amigos.

Sin embargo y frente a toda esta tristeza que se almacenaba en mi corazón, estaba dispuesta a asumir esta nueva experiencia con mucho entusiasmo y ganas de hacer las cosas bien.
En mi casa se respiraba silencio, un poco de miedo por parte de mi papá y mi mamá, pues ni ellos ni yo sabíamos cómo era el sitio a donde llegaría y esto generaba preocupación en ellos. Empecé la organización y clasificación de lo era necesario y útil llevar en mi maleta y eso fue aun más triste para todos… ver mi maleta lista fue sinónimo de partida.

SALIENDO DE NEIVA Y LLEGANDO A MI NUEVO HOGAR


Mientras observaba la carretera en la salida de Neiva mis ojos se llenaban de lágrimas, sentía una presión en el pecho y pensaba si realmente podría superar esta etapa de mi vida que se había convertido en un reto personal. Afortunadamente iba acompañada de cuatro compañeras más que de cierta manera eran mi refugio y mi consuelo, aunque cada una tenia sus propias razones para sentirse triste y callada.

Durante casi la mitad del camino estuvimos silenciosas y pensativas, pero cuando íbamos respirando ese aire puro que solo brinda el campo y esos paisajes tan hermosos, las sonrisas empezaron a reflejarse, un poco de burla unas de otras y una enorme ansiedad por conocer el sitio a donde llegaríamos.


Llegamos al pueblo de Palacio cerca de las 7:00 am, estaba haciendo mucho frío, nos encontramos con un pueblo solitario, "supongo que la gente esta trabajando" decía Flor, teníamos las maletas en la mitad de la única calle que había allí, " ahora que hacemos donde nos vamos a quedar" comentaba Lina y era la misma preocupación que pasaba por mi mente.

COMO NOS UBICAMOS

Encontrar un lugar dónde vivir durante por casi dos meses no fue nada fácil, los sitios que nos ofrecían eran pequeñas habitaciones oscuras y sucias, donde era casi imposible organizar las cuatro colchonetas. Al ver que eran casi las 9:00 am y no encontrábamos donde hospedarnos pensaba en dejar todo tirado y volver a mi casa, allí tenía todas mis cosas, mi cuarto y estaba en compañía de mi familia. Cuando ya estaba desesperada Diana nos dijo: "niñas allí les arriendan un salón grandisímo, es claro y van a estar cómodas, vamos para que los miren". Fuimos tras ella y mi alma sintió un gran alivio, el lugar era perfecto para nosotras y en ese mismo instante llevamos nuestras maletas. El salón estaba muy sucio, así que lo lavamos, limpiamos y organizamos.

Desde el principio distribuimos los cuatro espacios para la colchoneta de cada una, así garantizaríamos una buena convivencia. Escogimos el lugar donde estaría nuestra "cama, el armario y las cosas personales", durante el resto de mañana nos dedicamos a esta organización para que todo nos quedara muy bonito, pues este lugar se convertiría en nuestro hogar durante casi dos meses.

MANOS A LA OBRA


Mi motivación
Después de las dificultades que se habían presentado durante el hospedaje, mi estado de ánimo no era el mejor y mi única esperanza estaba centrada en la escuela y los niños(as) que aún no conocía. Al siguiente día me preparé desde muy temprano para ir a la escuelita San José, una camioneta me recogió cerca a las 6:30 am y me llevo hasta allí; seguramente a pie me hubiese gastado 1 hora o tal ves más.
Al llegar me encontré con una escuela en mal estado, sucia, desordenada tanto exterior como interiormente, con un sólo salón pequeño y oscuro en el cual debían recibir clase los niños (as) y con unos baños con problemas de tuberías.

A pesar de encontrar la escuela en ese estado tan lamentable, algo me decía que todo no estaría mal y efectivamente, en cambio de una escuela encontré unos niños y niñas llenos de alegría, felices de estar estudiando, orgullosos de vivir en el campo, pero inconformes con el cambio constante de sus maestros.

Además de encontrar esos niños y niñas con muchas cualidades me encontré con la profesora María fernanada que desde el primer momento me brindo su apoyo y colaboración en lo que necesitaba, aunque llevaba solamente una semana en esta escuela conocía muy bien la metodología de trabajo en la zona rural.

Así negociamos
Hicimos un conversatorio donde se planteo la propuesta de trabajo que teníamos en mente y el proyecto que los niños y las niñas estaban trabajando en la escuela. Durante este conversatorio se concluyó que:
  • El objetivo fundamental de nuestro proyecto seria investigar las transformaciones que ha tenido la vereda, la escuela y los actores educativos.
  • Por votación democrática el nombre que acordamos para el proyecto fue: "el ayer y el hoy de la cultura campesina".
  • Era necesario hacer unos acuerdos para que el trabajo que íbamos a realizar fuera organizado.
Nuestros acuerdos

  • Trabajo con mis compañeros en grupos.
  • Investigamos en todas las fuentes posibles las transformaciones de la vereda, escuela y actores educativos.
  • Mantenemos organizados los implementos de trabajos.
  • Cumplimos con las responsabilidades que asumimos.
  • Participamos, colaboramos y aportamos con nuestros conocimientos.


    • Los grupos de trabajo se armaron integrando 5 niños y niñas de todos los grados, el nombre de los grupos fueron estos: Los curiosos, los observadores, los genios y los caminantes.

    Empezamos a investigar

VEREDA
Después de negociar con los niños y niñas dimos inicio a la investigación acerca de los cambios que había tenido la vereda San José en los últimos tres años. Para este propósito hicimos reconocimiento de lo que ellos mismos sabían sobre su vereda, entrevistas a las personas que vivían hace mucho allí y visitas domiciliarias.

Niños(as) plasmando lo que conocen de la vereda Visitas domiciliarias









Entrevista Conociendo la vereda San José










Al realizar estas actividades para dar respuesta a los cambios que ha tenido la vereda, construimos diferentes textos, algunos son:

La vereda San José poco a poco ha avanzado, las trochas se han convertido en carretera, las fincas más grandes y muchos más cultivos. La junta de acción comunal empezó a buscar carros para que la gente de la vereda se pueda transportar a otras veredas.
Maria Fernanda Polania (grado 4°)


Últimamente en la vereda San José cultiva fríjol, maíz, bastante caña, café, en casi todas las fincas hay huerta y los cultivos son de mayor cantidad.
Jesús David Pascuas (grado 4°)
ESCUELA
Para saber los cambios que habia tenido la escuela hicimos un conversatorio donde los mismos niños y niñas decian en que cambió su escuela en los últimos años.

Hoy la escuela tiene el mismo salón, un restaurante, los baños y la huerta que ahora está más fea. La escuela cuenta con dos computadores, tableros, láminas de todas las áreas, laboratorio, biblioteca, implementos deportivos, equipo de sonido, VHS y televisor.
Dayana Rojas Bernal, 2°

TERMINE MI PRACTICA RURAL

Así socializamos

Preparamos una socialización que diera cuenta del proceso que habíamos llevado a cabo en la investigación de los cambios que tubo la vereda y la escuela San José.

Realizamos una puesta en escena: una familia hace sus actividades cotidianas y representa la importancia que han tenido los cambios en la vereda, luego sus hijos se van a la escuela y allí se muestran los cambios en la escuela y los beneficios que han traído.

Me despido de la comunidad de San José
Hoy después de haber terminado mi práctica rural puedo decir con gran convicción que despedirme de los niños y niñas que me abrieron su corazón, sus hogares y me ofrecieron su mundo es muy triste; pero también gratificante porque es un orgullo que una comunidad me haya demostrado cariño y que en tan poco tiempo haya logrado ser parte importante para los niños, niñas y padres de familia.

El último día en San José mi corazón lo acompañaban sentimientos de alegría por haber tenido la oportunidad de convivir con personas maravillosas y tristeza por tener que dejarlo. Una madre de familia como despedida me invito a su casa y me recibió con un delicioso almuerzo.